Thursday, June 18, 2009

El perfume

Todo iba bien hasta que llego el final infeliz, hasta que a los realizadores de la cinta se les ocurrió tornar lo que hubiese sido una buena película en un bodrio cinematográfico cuyo final mamuco no concuerda con la excelente historia que se estaba contando en el comienzo… pero así lo decía la novela.

No, no estoy hablando de mi… pensaba en una película que vi hace ya unos meses o un par de años quizás y que podría ser resumida por el pasado párrafo, además, coincidentemente lleva el mismo título del post de hoy.

He pensado demasiado en esa película, como ya dije, no por lo espectacular de su historia sino por la esencia de la trama donde se ensalza la importancia de un sentido que resulta para mi coincidentemente importante también.

Me pasa que tengo una rara afección a ciertos olores que inmediatamente me trasladan por diferentes escenarios, me llevan a otras Matrix y despiertan en mi automáticamente un sentido diferente, donde los recuerdos se recrean y donde sucede algo que, aunque sé que se va a oír pendejo lo diré: “Los olores toman forma”….

Dos días han pasado desde que percibí ese olor que me enloquece, desde que me pasó lo de Alladin, abrí la botella y el genio que hay dentro inmediatamente me recordó momentos, palabras, pláticas miradas y hasta lugares…. Inmediatamente, como ya dije, ese olor tomó forma…

Pudo haber sido diferente si se tratase de cualquier otro olor, cualquier otro aroma que no tuviera la importancia de este. Resulta que este olor en específico provoca en mí una sensación diferente, no sé si a los demás les suceda de la misma forma, pero a mí, este olor en particular me provoca una euforia incontrolable, un revoloteo de sensaciones y sentimientos difíciles de controlar….y ya ni hablar de los recuerdos…

Y ya desde antes me encantaba, lo olí por ahí, en diferentes lugares sin el mismo resultado, aunque sí con la misma sensación de descontrol que experimentaba al olerlo.

Ese olor tiene en mi vida un particular significado, no es un olor común, hay que buscarlo para obtenerlo, es un olor pasado de moda y que difícilmente se obtiene en los lugares donde suele haber varias especies… y cobra particular importancia ya que marcó una época en mi historia, se dejó sentir en un lapso importante de mi vida.

Ese olor es parte de una historia que en algún momento fue color de rosa, ese olor fue una prueba flagrante de que estaba sucediendo algo extraño dentro de mí, ese olor fue testigo de que lo que mi corazón sentía no era una equivocación.

Y de ahí a la fecha mi corazón se guió por ese olor… inevitablemente al sentir ese aroma mi mente, mi corazón, mis pensamientos y mis sentidos se trasladan a otra dimensión, a otro lugar donde los sentimientos se purifican y se manifiestan tal y como son, ese olor me lleva inmediatamente a lugares que alguna vez frecuenté, ese olor inevitablemente me remite a un color de piel, unos ojos, una mirada, una sonrisa…

Desde hace dos días tengo ese olor impregnado en mí, lo siento, me sigue guiando por ese camino que a pesar de las turbulencias y de lo sinuoso que se ha vuelto, aun existe…

No es casualidad que hace dos días haya percibido ese olor, muy cerca de ese lugar, no es casualidad que haya tenido que pasar por ahí, por ese mismo lugar antiguamente frecuentado, que haya estado en la misma avenida, muy cerca de ahí del lugar de mis reminiscencias…

Casi estoy seguro, por el lugar donde estuve, que no olía yo la botella, todo parece indicar que ese olor a Tribu de Bennetton venía de un lugar muy cercano…

1 comment:

Marita said...

Mi perfume es un Jean-Paul Gaultier, un torso de marino que me lleva directito al mar.... ahhhh que buen post primo, siempre me dejas suspirando. Te quiero