Chilo

Debió correr el año del 86 poco más o menos cuando mis primos (aunque son mis sobrinos, pero siendo más viejos que yo les digo primos) se fueron para California. El primo Huicho y el primo Pillos fuero llevados a los yunaites por sus padres puesto que recién habían obtenido la green card, y según ellos iban a irse a estudiar la secundaria para allá…creo que ni la hicieron…pero las idas a la hermana Republica de Guanajuato se hicieron muy aburridas.

Con ellos me la pasaba las gigantescas vacaciones de verano en Leondres y el rancho de mi abuela. Siendo ellos un par de años más grandes que yo, y más o menos en la misma tonalidad de desmadrozos pues nunca me faltó con quien jugar en las largas semanas que nos íbamos a pasar por aquella tierra bendita de Dios.

Al irse ellos, me quede solo, prácticamente pase mis más grandes aburriciones por allá, ya no había con quien ir a explorar el campo ni hacer maldades por doquier montados los tres en un pobre burro que para aquella pubertad edad y con los kilogramos obtenidos por el primo Pillos pues poco le faltaba al pobre animal para echar el bofe de la tremenda sofocada que se daba.

Total se fueron y para ese entonces solo quedaba un pequeño niño llamado Isidro, el cual a sus escasos 6 o 7 años me seguía como Solin a su Kalimán, siempre se me pegaba pa donde quiera que andaba, y en aquellas exploraciones que comencé a emprender solo, siempre me seguía, no había día en que no me lo quitara de encima. Algunas veces opte por esconderme, salir muy temprano en la mañana junto con el tío Emilio y su ganado y no regresar hasta que se escondiera el sol, pero como era obvio, siempre sabia donde encontrarme.

Alguna ocasión cuando fuimos a un paseo toda la familia a Guanajuato, el estaba ahí, y recuerdo bien, y el lo recuerda también en guasa que lo hice llorar por que me agarro la locura de decirle “Chivo miado”, haciendo alusión al mote con el que le conocían en la familia: Chilo.

El tiempo paso y Chilo creció, ya mucho mas pubertos se convirtió en mi acompañante de cabecera, íbamos pa todos lados juntos y en aquellos años sabáticos que tuve, el me acompaño. Yo me iba a pasar largas temporadas a Leondres y el estaba ahí, junto conmigo, contándonos todo y de todo.

Su máximo era irse pal otro lado, la última vez que anduvimos juntos por Guanajuas fue cuando se calló de la peña a la cual nos fuimos a pernoctar, allá, en lo alto del cerro del picacho una fría noche de Diciembre. Claro! Con unos buenos tequilas encima por que de no ser así hubiesen faltado cobijas y una buena dosis de valentía para afrontar a los espíritus y ánimas en pena que según se dice, habitan por aquella región.

En el 99 yo me encontraba en Dallas, había huelga en la Universidad y yo me fui pal otro lado ese tiempo, mi grata sorpresa fue escuchar el rumor de que chilo había pasado la frontera por Tijuana, y que había llegado a Selma, CA. A la casa de la prima Celia. Solo era cuestión de días para recibir a Chilo en tierra Texana para que comenzara su American Dream.

Llego y juntos trabajábamos en aquella ciudad, vivíamos en el mismo lugar, comíamos juntos, y andábamos de igual forma pa allá y pa aca. A la postre, yo me tuve que regresar y el se quedo allá para continuar se sueño americano que el pasado fin dio un paso gigantesco.

El sábado pasado Chilo se casó, durante los pasados 9 años ha hecho su vida allende las fronteras, hace más o menos 5 años conoció a una linda pochita llamada Nicole y con ella contrajo nupcias el pasado sábado.

Hace un par de meses poco más o menos recibí su llamada, me advirtió del bodorrio y me pidió que hiciera lo posible por estar ahí. No pude estar. Muchas y variadas cosas me impidieron disfrutar de la boda de uno de mis sobrinos mas queridos. Me lo perdí!!!



El sábado pasado no me quedó otra que llamarle, lo encontré justo antes de que la pachanga diera comienzo, le deseé felicidades y le mande un enorme abrazo a él y a Nicole por esta valiente decisión y para desearles además la más infinita y dulce de las historias de amor.

Espero con ansias el DVD para ver aunque sea por TV el bodorrio del que me perdí….

Ni paper!!!

Un cuento para Marita

Mi querida Mara Yolanda Aguilar Ponce….Una vez más gracias por ser tan asidua fan de este espacio que es tuyo, donde recreas tu imaginación, en donde te jalas los cabellos cuando no entiendes cosas, en donde te muerdes las uñas por la expectativa de lo que contaré en un siguiente, divertido, mafufo o quizás triste capitulo de mi vida.

Gracias en verdad por estar al pendiente y de antemano te pido una disculpa por las largas dos semanas en que te he tenido a ti y a todos mis fans con el alma en un hilo sin saber los por que´s de mi repentina ausencia, sin saber lo que pasa, por que no es cribo, por que me ausento o por que simplemente dejo de escribir.

Sabes bien que eso de la escribida pus no era una de mis más grandes aptitudes en la vida, ahora escribo mas que nada por pasatiempo, por que en ocasiones he llegado a una pagina llamada http://www.findelinternet.com y la verdad que me harta tener en ocasiones tan poco que hacer, que por eso ocupo mi tiempo en escribir toda la sarta de pendejadas que has leído en este sitio.

Hace un par de días ví el comentario donde me pedías que te contara algo, OK, si bien es cierto que siempre hay algo que contar, pues la musa inspiradora esta dormida, esta en las nubes, o esta en silencio simplemente. Quizás por eso se me van los días sin escribir nada, en ocasiones escribo a diario, o para fechas que sucederán, pero en días como estos últimos, pues la neta es que he echado la hueva.

Te contaré que tenía planes de ir a los Estados Unidos, de hecho en estos momentos en los que escribo esto estaría pasando quizás por San Antonio, trepado en un Greyhound viendo la planicie Texana a los alrededores.

Resulta que el sábado se casa un sobrino mío muy querido y tenia planes de ir, de hecho, desde que me llamo se me alborotó la hormona de ir pero para estos últimos días lo pensé mejor y dadas las variadas circunstancias y problemática de mi acontecer cotidiano, pues aun ando por aquí.

Mi sobrino me llamó desde hace un par de meses, me aviso con tiempo suficiente para hacer los preparativos necesarios pero como sabrás bien, soy de pocos planes, me gusta mas lo espontáneo que preparar las cosas, y hace dos días, estaba con la tarjeta de crédito ya en la mano, y con el boleto reservado justo para dar un clic y realizar la compra del boleto, pero no, no lo hice.

Se que me perderé de mucho si no voy, por lo menos darle un gran abrazo y un beso a un ser con el cual he pasado momentos inolvidables en mi vida, y el poder estar con el en un momento tan importante y trascendental en su vida, para mi era motivo de gran satisfacción, pero ni modo, hay cosas que atender aquí y solo me resta llamarle y desearle la mas infinita de las felicidades para esta nueva etapa de su vida.

Así pues amiga Marita, en estos momentos solo me queda la opción de comprar un vuelo de último momento pero no creo atreverme, sale muy caro y con los gastos que hay que solventar en esta dura vida, pues resulta un pequeño lujo que a lo mejor creo que no lo valgo.

Pues ni modo, así es la vida, como diría mi ilustre y sabia abuela: “hay veces que nada el pato, y hay veces que ni agua bebe”…

Pero si me decido Marita, ya sabrás de mis travesías ya sea por tierra Texana o de perdis aquí en nuestra humeante capirucha, de esto estate segura…..

Te mando un gran abrazo y un enorme beso, y espero verte pronto!!!!

El Canalla

Siempre que se escuchaba un chiflido que sonaba más o menos así: Fiiiiii, fiiiiuuuu, fiiiiuuuuu, sabíamos que era él, nadie tenía un chiflido más inconfundible y aguardientoso, tampoco nadie más era tan escandaloso, ni tan poco prudente, ni tan desvergonzado como mi buen amigo El Canalla.

Desde muy niño ya era el Canalla, quizás por su peculiar valemadrismo y su siempre irreverente forma de comportarse, lo cierto es que al oír: el Canalla, sonaba como a una persona adulta, de lo peor, quizás hasta un matón, y verdaderamente con ese mote pocos se hubieran imaginado que solo se trataba de un niño de 10 años.

La carencia de un núcleo familiar estable, y la falta de muchas cosas hicieron de el Canalla un ser rebelde y mas valemadres de lo que fue de niño, pero siempre conservando su gran corazón, y sus buenos principios que hasta la fecha aun son parte de el.

El sábado pasado me encontraba al teléfono, la larga espera escuchando la grabación de un call center de un banco que te dice: “Su llamada es lo mas importante para nosotros” es de lo mas desesperante, y yo me pregunto: Si es lo mas importante, tons por que chingados no contestan rápido????

Habían pasado unos 15 minutos escuchando las mismas sandeces al teléfono, me paseaba en casa de mi padre de la sala al comedor, de su recamara a la otra caminando como en sala de maternidad y no había contestación, de repente me asomo por la ventana y lo ví ahí parado, inmediatamente supe que era él, no lo confundí, tanto tiempo sin verlo que mande al carajo a los del banco y colgué el teléfono.

Baje corriendo y abrí el zaguán, esperaba con ansias que no se moviera, deseaba con inmensas ganas que no hubiese sido un espejismo y no, baje la banqueta, pase junto a la camioneta azul con placas de Guanajuato y al llegar a media calle le grité: Kiobole Canario!!!!

Corrí a su encuentro, un enorme abrazo, un beso y con las inevitables lágrimas en los ojos lo recibí, le di la bienvenida después de tiempo de no verlo. Y como no me iba a alegrar ver a uno de mis mejores amigos de la infancia caminando una vez mas por la calle donde nacimos, donde crecimos, donde nos hicimos hombres.

Efusivamente lo abrazaba, no dejaba de volverlo a abrazar, y de demostrarle mi gusto por verlo, charlamos un rato y le dije que me tenía que ir, que llevaría a mi nene al cine y que por la noche lo veía. Se sonrió y me dijo que quería conocerlo, que sabia que tenia un hijo pero que nunca tuvo el gusto de conocerlo.

Después del cine y de dejar al nene en casa fui a buscarlo, no fue difícil encontrarlo, el gusto por verlo no cesaba, algunos otros amigos que tenían el mismo tiempo de no verlo llegaron para saludarlo, y así, nos quedamos platicando hasta la madrugada, escuchando sus historias, sus anécdotas y su vida en los últimos años.

El Gandul, El Canario, El Gandalla, El Agrio, o el Canalla, como quiera que me refería a el siempre me contestaba, siempre estaba presto para la vagancia y nunca tenía falta, con el crecí y con el pasé muchas aventuras y no era para menos que el día que lo volví a ver, lo escuchara y le dedicara unas cuantas horas.

Ya es un Canalla distinto, un Canalla más sobrio, mas centrado, mas maduro, y como no habría de serlo, 5 años y 3 meses en Chirona cambian a cualquiera, cuantimás cuando se estuvo ahí por una tontería.

Hoy es un canalla diferente, más serio, más ecuánime, Dios ha tocado su corazón, habla de amor, de justicia y de razonamientos y de cosas elementales. Pero aun sigue habiendo mucho de aquel Canalla de la infancia, de Aquel canalla que mentaba madres y gritaba peladeces de esquina a esquina.

Ha cambiado pero sigue igual, su cambio es para bien, esos cinco años y cacho en la sombra le han servido para ser un mejor ser humano, de por si, siempre fue de gran corazón, siempre fue bondadoso, siempre fue una buena persona, solo que la beberecua y los vicios lo llevaron a cometer tontería tras tontería.

Yo no concibo mi vida sin el Canalla, de hecho, tengo mucho de el Canalla en mí, ya sea jugando en la infancia, huevoneando en la adolescencia, o parrandeando en la juventud el Canalla siempre ha sido parte de mi vida, siempre conmigo, siempre a mi lado, por algo tenemos una amistad que ya ha de andar por los 25 años…

El cansancio comenzó a hacer su tarea, las 2:00 de la mañana y comenzábamos a bostezar...Entre plática y plática salieron algunas anécdotas y recordamos nuestras edades y después se dijo: Pues ya no estamos tan chavitos…es verdad, y no somos unos niños…

2:30 de la mañana, el Canalla me acompaño a dejar al Fritz a su casa, quien vive lejos, muy lejos, de regreso seguía hablándome de sus experiencias y lo que vivió en el lejano Oriente.

En un semáforo en rojo, el silencio se apodero de la escena y me dijo: “Regálame un cigarro mi Chavo!!” Le dije en tono de broma: Te va a castigar Dios por fumar wey!. Se río y me dijo: “Ya casi no fumaba tanto, de hecho ya no lo hacia”...Encendió el cigarro y al sacar la primera bocanada y suspirando dijo algo mas: …pero se me antojo verte fumar, será por que……Ahora soy libre….

El amigo que se fue

Hace dos años perdí a un ser querido y escribi esto:
Hoy hice una pequeña edicion por que aquel era mas largo y con otros detalles que resultan irrelevantes......

No me había parado ahí desde hace trece años, no había vuelto a pisar esa tierra ni percibir ese aroma de flores combinado con agua putrefacta. Aquella tarde de Enero del 93 vino inmediatamente a mi recuerdo, el aire soplaba con igual intensidad, quizás por estar algunos metros arriba de un cerro donde la vista del oriente de la ciudad se dibuja en el paisaje.

Nunca juré no volverme a parar ahí, de hecho, nunca quise hacerlo, ese lugar me traía amargos recuerdos y durante 13 largos años me hice pendejo para ir, en ocasiones sentía la necesidad de hacerlo, pero no, nunca acudí.

El día de ayer volví a estar ahí, en el mismo lugar, donde yace mi abuela, donde ahora mi primo querido descansa en paz.

Y este llanto es por un amigo que se fue, no lo puedo evitar, no puedo evitar recordarlo sin que mis lagrimas broten de dolor, no puedo evitar pensar en él y en las tantas y tantas cosas que pasamos juntos y que el día de ayer, se terminaron.

Siempre fue mi consejero, mi compañero, y aunque no lo hice el pie de la letra, fue mi ejemplo a seguir. Siempre ame su forma de vivir la vida, sin preocupaciones, sin obligaciones, siempre sonriendo y de buen humor.

Aprendí de él cosas maravillosas, cómo el bromear, cómo sonreír, cómo echar desmadre siempre, pero también aprendí otras cosas no tan maravillosas como quitarle el aluminio al papel de las cajetillas de cigarro, aprendí lo que era un PCP, un “primo”, un “perro”, un flavio y otras tantas cosas. Siempre lo admire por ser feliz, por vivir la vida sin pedos y sin preocuparse por nada.

Le cantaba a mi abuela: “Carmen, se me perdió la cadenita” obligándola a bailar, mi abuela se encabronaba y lo empujaba, pero él seguía el ritmo con sus inconfundibles pulgares levantados, siempre estando alegre y siempre guapachozon!

Era mi primo consentido, mis primeros recuerdos de la infancia eran jugando con el, aunque él ya un poco labregón, pero siempre con alma de niño!. A el le debo muchas cosas en mi vida, mucho cariño, mucho amor, y sobre todo el ser fiel devoto de las superpoderosas, inmaculadas y omnipotentes águilas del América!!!.

Yo también para el fui su consentido, me aconsejaba, me preguntaba, y siempre su mejor consejo era decirme: “por la derecha”, que siempre lo interpreté como portarme bien. Que cosas mas bipolares tiene la vida como recibir un consejo así de alguien que no lo hace?, pero así era él, queriendo lo mejor para los demás, siempre y cuando lo dejaran hacer a el lo que siempre le gustó, huevonear.

Siempre fui su alumno mas adelantado, siempre de el sentí un cariño especial, mas que a sus hermanos, él y yo siempre fuimos compañeros, cómplices, los mejores amigos, lo mejores hermanos. A últimas fechas me decía que yo era su ídolo, por las cosas que había logrado, y por los lugares a donde había llegado.

Pero la única verdad es que el era el mío….el me enseño lo que se, cómo vivir, cómo ser feliz, cómo vivir si preocupaciones, cómo andar en el fuego y no quemarse…Por eso el día de ayer muchos se extrañaron al verme llorar, sentí la mirada de muchos, escuchaba a muchos preguntarse como es que un hombre de 32 años le llora a uno de 48, cómo es que un hombre de apariencia fuerte y ruda se derrumba sobre un ataúd para llorarle a otro hombre….

Hoy añoro sus sabios consejos, sus entretenidas pláticas, sus carcajadas. Se muy bien que en la vida no hay hubieras, pero de haber podido, lo hubiese disfrutado mas, estar mas con el, y definitivamente le diría algo que jamás le dije, le diría cuanto lo amaba!!!!

Y este llanto es por un amigo que se fue, que se me ha adelantado en el camino, ahora el único consuelo que tengo es que un buen día lo volveré a ver, me volveré a encontrar con él, allá, donde se vive mejor, donde se esta mejor. Por lo pronto ya extraño muchas cosas, su presencia, sus carcajadas, sus bromas, y su inconfundible voz acentuando las “eses” con la lengua entre sus dientes separados de enfrente!

Y en verdad, en la vida no hay hubieras, pero como quisiera tenerlo aquí a mi lado, platicando como lo hacíamos, comiendo gente, bromeando, haciéndome preguntas sobre mi, interesado en mi, platicándome anécdotas suyas, de nosotros, diciéndome; Eres re-Cábula Carnal!!!!.

Me gustaría que estuviera aquí, haciendo todo eso que nos llevo de ser primos a convertirnos en hermanos, como me gustaría tenerlo aquí y disfrutar de este momento, haciendo cualquier cosa, eso no importa!, solo disfrutando de su presencia, haciendo lo que mas le gustaba, quizás tomando un par de cervezas y quemando un buen toque!...

Hoy lloro su perdida y me duele su partida, ya lo extraño, y si algún día la vida me bendice con un hijo más, seguramente se llamara LUIS, como el amigo que se fue!