De película

Había echado la hueva, cierto, no había ni hecho el intento por escribir algo que los deleitara queridos lectores. Y lo hice “apropositamente” ya que el último escrito fue para mí como un broche, como cerrar un gran telón de un drama que un día fue y que ya no será… fue el punto final de un tema que no pienso tocar nuevamente, del cual ya no pienso dedicarle una línea más, ya!, de ese alpiste me cansé!

De modo tal que tuve oportunidades de retomar el buen ejercicio de la escritura, tuve de repente la necesidad de hacerlo, de reintentar retomar el sano deporte de inventar pendejadas, de contar historias y de recrear escenarios, pero no, no lo hice. Y no lo hice simple y sencillamente porque quise estar seguro de que no iba a volver a caer en la misma cantaleta, a ese disco rayado de mis dolores y mis recuerdos…

Creo que lo conseguí, creo que al pasar de los días he conseguido quitarme un poco del pensamiento esas tormentosas preguntas sin respuestas, creo que he encontrado la manera de ocupar mi atención en cosas de otra índole y además, he encontrado en una nueva película, una historia más interesante que las antiguas, descoloridas y aburridas historias del cine mudo.

Sé que tengo que ser cauteloso, la última vez que intenté dedicarme al cine Hollywoodense salí algo raspado, medio arrastrado, y con pocas ganas de intentarle de nuevo al actorcito. Juré y perjuré no volver más a pisar los foros y locaciones de grabación, pero me resultó imposible, yo solo soy un simple ciervo del señor como para contradecirlo. Quien soy yo para sacarle la vuelta a los designios del altísimo?....

…es un capricho del señor ponerme en el set de grabación una vez más protagonizando una historia y es imposible hacerse pendejo….

Esta vez no hubo casting, los protagonistas de la historia nos hemos apuntado por si solos, hemos caído ante los irresistibles llamados del deseo y de la euforia provocada por el afrodisiaco que es la carcajada. Hemos llegado a un punto no imaginado, ni por mí, ni por muchos, y ni por la producción.

Pero ya decía yo que así se vive la vida, protagonizando historias, resolviendo encrucijadas y tomando al toro por los cuernos, ni modo que eche madres y lance pestes cuando el destino me ha puesto en la antesala de una nueva película mas, y ésta, prometedoramente ganadora del Oscar.

Soy ya pues, muy probablemente adicto a las historias de locos, a esas protagonizadas por dementes, historias confabuladas para poner a prueba mi sabiduría de este largo camino recorrido. Historias que parecen ser sacadas del manicomio.

Pero vale la pena, como ya dije, anatómicamente esta nueva película se lleva el Oscar, será premiada por sus matices estéticos, por su arte, su escenografía, locaciones y muy probablemente su musicalización. Sera la película mejor realizada, aunque la historia ya es de antemano conocida….

Esperemos que se dé el pizarrazo inicial, que la Directora siga dando sus indicaciones escénicas y sus tips histriónicos, y esperemos que el resto solo sea coser y cantar…

El más feliz será Carmelo ya que la primera escena será dedicada a él!

Ahí les cuento!

Acto de contrición

Ahora lo sé… en este momento escucho esa canción que nos conectó. Esa rola fuera de nuestros estándares pero que aun así entre sonrisas y palpitaciones del corazón, aceptamos que nos gustaba… y así, al aceptarlo, con esas miradas mutuas aceptamos todo lo demás, todo lo evidente, todo lo que se derramaba, todo lo que a simple vista se podía observar…

Ahora lo sé… y siempre uno lo sabe solo que nos hacemos weyes. Siempre uno sabe lo que siente y por quien lo siente, el corazón nunca se equivoca, el corazón siempre sabe lo que quiere aunque tratemos de engañarlo.

Ahora sé también que debo respetar decisiones tomadas, unas bajo los efectos de la ira, otras bajo los de ciertos inhibidores, otras tomadas con las tripas y otras tantas más en total y absoluta serenidad… (Estas últimas, las últimas, valga la rebuznancia…)

Sé también que me tengo que querer a mí mismo, y quererme a mí mismo es soltar todas esas cosas que me obsesionan, que me atormentan, dejar que la vida fluya y que no puedo poner todas mis energías y basar mi vida en una sola cosa, en un solo evento, en un solo escenario…

Ahora sé que no debo vivir con la angustia de saber si regresaran esos días o no, de angustiarme día a día esperando ese regreso, ese día maravilloso en el cual los orgullos desaparezcan y por fin podamos decir: ok, no hay pedo!

Hoy sé que no debo rogar, no debo andar detrás con suplicas que no son escuchadas, no puedo andar pensando ni rogándole al destino que me de la dicha de ese regreso si yo mismo fui el que hizo todo lo posible por crear una lejanía…

Sé sin temor a equivocarme que si quiero ser un adulto hecho y derecho tengo que aprender a comportarme como tal, a actuar como tal y no perder el tiempo con actitudes estúpidas y orgullos rancheros, mucho menos con miedos idiotas que han sido la principal causa de esta desgracia.

Sé más que nunca que no debo dejar de ser quien soy, no debo dejar de ser autentico sin que esto signifique un irrespeto hacia los demás. Sé que en un principio mi forma de ser y de actuar era la chispa que encendía los momentos más aburridos, que eso pudo haber sido un imán para la gente necesitada de alegría, pero también sé que mi más profunda forma de ser, cuando se ahonda en mis adentros, se descubren demonios ocultos, seres irreconocibles pertenecientes al lado oscuro que todo mundo tenemos, sin así decir que soy eso que alguna vez demostré….

Hoy reconozco que las cosas no tienen que ser como o quiero que sean, que los planes se modifican según el vertiginoso andar de todo mundo, que desaparecen en un santiamén, que mis planes, mis antojos y mi regalada gana se modifica según mis actos puesto que mi futuro es consecuencia de ellos mismos…

Debo mejorar mi amor propio, amarme a mí mismo para no dejar que todo este entorno ni toda esa historia interminable me afecte. Debo amarme a mí mismo para así comprenderme, entenderme y perdonarme las cosas atroces que he hecho y que pudieron darle en la madre a mi felicidad, debo amarme para después del perdón, darme soluciones y abrirme caminos para reiniciar la búsqueda de ese pequeño orgasmo instantáneo llamado felicidad…

Hoy debo aceptar que si algún día agradé no quiere decir que siempre lo voy a hacer y que muy probablemente hoy no se quiera saber ni mi nombre. También tengo que aceptar que todo mundo tiene el derecho de tomar sus propias decisiones y si una de ellas es no tener la mínima intención de contactarme, de saber de mí, debo aceptarlo. Debo aceptar también, que cada persona es tan libre de querer estar conmigo, como tan libre de no querer estarlo.

Debo recordar que las mejores cosas de la vida se obtienen con paciencia, esperando y luchando por ellas a la vez. Que el producto de la impaciencia es tan peligroso que puede arruinar hasta la más bella historia jamás contada….

Hoy sé, que fui impaciente y por eso perdí…. Pero sigo aprendiendo, el día a día es una escuela en la cual nunca se termina de aprender. Hoy he perdido, he perdido una batalla de muchos años, y no la perdí contra adversarios, no la perdí en contra de alguien, no me siento ni siquiera derrotado…. He perdido una batalla contra el peor de mis enemigos: Yo mismo! Y más que derrotado me siento: aleccionado… hoy solo me resta aprender de la lección.

Hoy que me siento así, con la lección aprendida, con profundos dolores, con la fe perdida, con la resignación a flor de piel, solo puedo decir que lo antes escrito es la neta del planeta, que no pienso mover un dedo, que si el destino me tiene preparado algo diferente, bienvenido sea, si no, merecido me lo tengo.

Ha sido demasiado, demasiado sufrir, demasiado esperar, demasiado auto castigarse, demasiado de todo y muy poco de lo lindo.

Hoy se que no hay vuelta de hoja, que por más que llore, pataleé, chille o berreé nada cambiara las decisiones tomadas, buenas o malas, decisiones que nos han traído hasta aquí, hasta el borde de la desesperanza. Porque hasta no decidir es una decisión, y hasta en eso hemos pecado…

Hoy solo puedo expresar una frase de mi muy ingeniosa y amada abuela y decir: Agarro mi culito en brazos y me voy…

Me voy deseando desde lo más profundo de mi amor y de mi corazón: Que dios te bendiga!

Carmen

Tengo infinidad de recuerdos de ese lugar, durante mi niñez fue el sitio más hermoso sobre la tierra, no podía esperar a las vacaciones de verano (que en aquel tiempo eran de dos meses) para regresar a ese lugar que siempre que voy me traslada a otra dimensión, me lleva a ver la vida diferente, a recordarme quien soy y de donde vengo, donde no existen comodidades ni excentricidades.

Un lugar que no sabe de lujo y de confort, donde las palabras como modernidad y globalización no existen en el diccionario…. creo que ni siquiera hay diccionarios; un lugar donde no hay marcas publicitarias ni mucho menos saben que la ropa que traes la compraste en un centro comercial….es más, no saben que es un centro comercial…

Un lugar donde el tiempo se detiene, donde las leyendas e historias que se cuentan parecen haber sucedido ayer, no solo por la claridad y detalle con la que se cuentan, sino porque parece que las épocas no pasan por ahí, como que el tiempo no pasa, solo se queda, un lugar donde parece que el tiempo avanza lentamente…

Al centro de ese maravilloso lugar existe una construcción abandonada, más bien las ruinas de lo que fue una construcción, éstas en un terreno medianamente grande, unos cuantos árboles característicos de ese lugar llamados: Huizaches, y alrededor la frescura de su follaje.

Y verdaderamente es el centro. Es una pequeña loma en la cual hay pequeñas casas alrededor, y la cima de esta loma es conocida como: “el Acuaro”. La razón la desconozco, no tengo ni la más mínima idea de lo que la palabra signifique, pero los lugareños saben que al ser el sitio más alto de la pequeña comunidad es por demás un terreno envidiable, más de uno quisiera ser dueño de ese estratégico lugar.

Hoy está en ruinas, existen adobes tirados y destruidos, los huizaches dan una sombra enorme y cada vez que subo cruzando corrales y potreros me imagino aquel lugar en todo su esplendor….

No puedo evitar imaginarme a un famoso señor llamado Evaristo cuidando de sus múltiples hijos y en compañía de Doña Santiaga. Por las mañanas el desayuno leguminoso con huevos de gallina recién puestos; acompañado por las infaltables tortillas de comal y la habitación impregnada por el olor de leña ardiendo y del humo del fogón y tapizada de hollín en un rincón…

Por las tardes Don Evaristo cuidando de su ganado en el campo y la esposa en casa muy probablemente preparando otro guiso leguminoso; los niños jugueteando en el enorme patio de “el Acuaro”, quizás correteándose o con algún juego de la época y entre esos niños, ella.

Por las noches, el mítico Acuaro se convierte en un lugar en penumbras. En aquellos tiempos antes de la llegada de las velas, los quinqués de manufactura casera daban luz a las pocas viviendas que había en aquel entonces…

Y así ocurrían los días…

En ese lugar hace 97 años nació Doña Carmen Torres Jaramillo, mi abuela, mi muy famosa, amada y dicharachera abuela…

Hoy no podía dejar pasar la oportunidad de hablar de ella, de desearle un feliz cumpleaños, esté donde esté y con la remembranza del principio quiero agradecerle su infinita bondad, su infinito amor, su infinito e incondicional amor que siempre me manifestó y también agradecerle y decirle que todo eso que escribí en un principio es su herencia, su legado…

Agradezco a mi abuela por toda esa enseñanza que me dejó, a su modo y a su manera, pero enseñanza al fin y al cabo… que no tengo otra cosa en mi que no sea esa su enseñanza y mis raíces…

Felicidades Jefa!

Better Place

Corrían mis últimas horas en el estado de Virginia, estaba cayendo una lluvia tupida, de aquellas que ni llueve bien, y ni se quitan. Noviembre estaba a la mitad, se acercaba mi cumpleaños, esa aguanieve y el cielo gris y encapotado me tenían algo blue; había hecho un cambio de planes y opté por no ir al partido de los Cowboys que jugaban en Landover, MD un día después y pa acabarla de chingar me cargaba unos nervios del carajo solo de saber que en un par de horas estaría trepado en un avión que me regresaría a Mexicalpan de las tunas….

Me fumé el último cigarrillo antes de subir al Super Shuttle que me llevaba al aeropuerto de Dulles. Sentado yo a la mitad de la Van y con todo el panorama de frente observaba la lluvia en el camino, la inmensidad de la zona, la amplitud del freeway, la maleza entre la cual se observaban algunas casas, sonaba esa canción en la radio y yo me preguntaba: Acaso será esto un lugar mejor???

Se me quedó para la memoria…. Días después de mi regreso intenté plasmar esa idea, intenté también subirlo a este sitio del cual ustedes son adictos pero por alguna u otra cosa siempre hay cosas que se quedan ahí en el tintero y que nunca salen a la luz. Fragmentos de escritos que nunca llegan a ser publicados y quizás por el nacimiento de otras ideas, estos pasan a segundo término…

Ayer llegué a casa tarde, mi primera sesión de voleibol resultó como me lo esperaba, desestresante y agotadora. Al llegar a casa tomé un baño, me tomé un coctel de pastillas que mi hermana gentilmente me recomendó para evitar la fatiga y me senté en mi sofá a ver la telera.

Se daba un resumen del memorial del que hasta hace algunos días era llamado el rey…me conmovió realmente!

He hablado de los íconos, he hablado de las cosas importantes para mí, algunas veces he hablado de amor, de desamor, de pachecadas, de mariguanés y media y hasta por ahí una que otra estupidez, pero nunca había hablado de las cosas que me conmueven…(creo yo)

La última frase de Paris me conmovió, nomás porque desde chiquito me ensenaron que los hombres no lloran y porque de repente necesito hacerme el fuerte para que muchas cosas no me tumben si no, si hubiera derramado las de cocodrilo…

Era de esperarse una escena conmovedora y que las últimas palabras de una niña hacia su padre muerto fueran así, no era para menos, creo que a muchos de nosotros quienes hemos tenido una pérdida irreparable, también hemos derramado lágrimas y expresado frases conmovedoras…

No solo fue esa escena, no solo el ver a una familia con una pena fue lo que me conmovió. Ya había hablado de lo que ese personaje representa o representó para mí, en mi vida, sin llegar a decir propiamente que fue un ídolo, simple y sencillamente crecí en la misma época en que su estrella brilló.

No solo fue el hecho de su muerte, sino que me vienen a la mente muchas cosas y entre tantas de ellas están los deseos convertidos en canción y que hablan de la necesidad de un mundo mejor, un lugar donde no haya guerras, donde solo haya sonrisas, donde no exista el dolor y donde no haya gente muriéndose de hambre.

Al final del programa especial sonó “Heal de World” y casi me hace llorar. No sé si la escena del Funeral del rey del pop o si las palabras de Paris, o si la letra de la rola en cuestión o todo en su conjunto fue lo que casi me llevo al extremo de derramar las de San Pedro…

Algo pasó, algo pasa en mí. No hoy, ni desde ayer, desde hace mucho, quizás desde que era niño, a lo mejor siempre lo tuve y ahora solo lo expreso, no lo sé…. Pero siempre; siempre, siempre he tenido corazón de pollo…

…y ayer casi me pongo a llorar.

Aquel día de Noviembre cuando regresaba de DC sonó en el Super Shuttle: “Heal the World”. Había estado dos largas semanas en Washington y un poco antes dos más en la Florida, de modo tal que había estado lejos de casa, en un país diferente, sin hablar con mi gente, con los míos, mis cuates, mi familia, en un lugar lejano donde dicen que los sueños se pueden alcanzar, en un lugar mejor…

Aquel día de Noviembre cuando regresaba de DC sonó en el Super Shuttle: “Heal de World”, y también casi me puse a llorar…

…Chale, no se burlen, es en serio!!!!


“Heal the world, make it a better place, for you and for me, and the entire human race…There are people dying, if you care enough for the living…Make a better place for you and for me”…

El diablo y sus secuelas

Necesité de unas 48 horas sueño, 96 horas de no bañarme, un sinfín de horas-nalga frente al televisor, unas intrépidas sesiones de Xbox junto a Hammer Head, interminables shots de Nestea y de jugo de naranja artificial, litros y litros de agua de limón y unas fuertes dosis de vitamina “T” y de comida hecha fuera de casa para sacar una cruda mal curada que me estuvo atormentando la semana pasada.

Todo comenzó cuando dejé entrar al diablo en mi casa, al mismisimo chamuco proveniente de los infiernos, al Satánas habitante de la hermana republica de Metepec, primo hemano del diablo mayor, de aquel que quema cuetes en la bombonera de Toluca.

Era una reunión sencilla, normal, natural y sin igual. Tenia un pomito de Jack Daniels el cual pretendia darle matarili con mis carnales del alma y asi fue…La ronda de chelas previa nos dejó con medio estoque dentro y para la hora de abrir el pomo ya arrastrabamos las “eses”’.

Pero no teminó todo ahí, los mas lúcidos resolvieron irse temprano por temor al alcoholimetro o quizás por la responsabilidad que portan al ser padres de familia. Aunque mas bien yo creo que sus domadoras les pican las costillas y llega cierta hora en la que ya no los dejan chupar agusto…ésto último creo que es lo más probable…

Pero tengo un amigo, mi mejor amigo, que nunca se rinde, que su singular ingenio aunado a su baquetonería le invitan a no seguir el ejemplo de los demas e irse a su casa, su simpatía y su ligereza le indican que entre mas se vayan alcanza mas el chupe…

Y asi fue…nos dieron las 5 de la mañana y la última gota de Whisky de Tennessee sucumbió en nuestros gañotes. Ya cuando la platica se habia vuelto profunda y densa y a “Cosa” le había dado por hablar y hablar y no decir ni madres….decidimos irnos a dormir….

El siguiente dia comenzaba en un domingo de cruda, las tiernas palabras de la hija del Reno diciendome:” León, León”… me despertaron… Inmediatamente escuché el inconfundible pssssssssss de una lata de cerveza abrirse, al voltear observé al demonio una vez mas empinandose una de las chelas que la noche anterior guardó para curarsela.

Inmediatamente y con su cara de grinch maldoso me dijo: ”No te quieres desayunar una chelita????”, y yo ni tardo ni perezoso le estiré la mano…y así empezó un domingo de via crucis…

Fuimos a comprar guaguacoa para el almuerzo, la espantosa cruda que traíamos la refrescamos con la chela que se discutió el barbacoyero. El Reno ya queria seguir la peda, pero optamos por regresar a casa, no sin antes hacer una escala técnica en un OXXO para comprar mas parque.
Por un momento me espanté de la cantidad de cerveza que llevabamos, pero a las 8:30 de la noche comprendí que fue suficiente….

El diablo se fue de mi casa ya rayando el alba, pero dejó un cierto olor a azufre en el ambiente…me dejo una peda kilometrica, una cruda espantosa y una desvelada que no me pude reponer de todo eso en toda la semana.

El viernes bendito dios no trabajé, y ya estando Hammer Head en las ultimas de su ciclo escolar propuse que no fuera a sus clases para asi dormir de filo hasta que el sol me chiflara. Asi fue, solo medio me desperté a hacerle algo de desayunar y dormi hasta las 2 de la tarde…

Y casi en el mismo tono siguieron los dias subsecuentes… me dediqué a descansar, a no moverme, y a hacerme pendejo (que ni trabajo me cuesta) durante tres dias para aliviarme de la posesión que sufrí por la ultima visita del Diablo a mi casa…

Hoy lo odio mas que nunca y eso que el muy cabrón ya amenazó con organizar una ida a Acapulco próximamente…

Dios nos agarre confesados!!!!