De Safari

Que chula es Puebla....que linda!

El sábado pasado, a consecuencia de un promesa que tenia desde hace ya un par de meses con mi vástago, nos juimos directito y sin escalas con rumbo al oriente del país.

El día no comenzó de maravilla dado que mi camioneta amaneció con un cristal roto producto de un altercado con un vecino hace ya unos cuantos meses. Que como se que fue el vecino???, pues fácilmente, en una calle donde hay muchos cristales que romper, rompen precisamente el mió, y casualmente se va viva una camioneta que estaba estacionada justo atrás, ombligo con ombligo de la mía….pero bueno, como diría mi abuelita: a cada Santito se le llega su fiestecita, y ya mero es Septiembre!!!!, o Octubre????, que tal un regalo de cumpleaños para mi por allá de Noviembre??!!!, mejor como diría el gran sabio griego Renofocles: La venganza es dulce y yo cuando mas disfruto es cuando me vengo!!!!!...

Pues bien, dado que ya me habían chingado el cristal y con el coraje de que a ojo de buen cubero tendría que desembuchar una milaneza para reemplazar el vidrio, nos lanzamos al viaje mágico y misterioso hacia la hermana republica de Puebla.

Después de tomarnos nuestro tiempo en salir de la ciudad, debido a que están haciendo un distribuidor vial a la altura de Santa Martha y que por lo que se ve estarán muy chidos…pues al final lo logramos.

Hacia años que no salía de la ciudad por ese lado, de hecho todos mis viajes al interior han sido hacia el norte o en su defecto el clásico Acapulcazo y para eso hay que salir hacia Cuernavaca. De pronto recordé aquellos años cuando mi madre tenia una comadre que vivía ahí, “pasandito no´mas el cerro”; en aquellos ayeres le llamaban el puente rojo, por que justamente ahí había un puente metálico pintado de este color. Se me hacia eterno llegar hasta allá, era como ir realmente a provincia. Recordaba que atrás de un cerro que ya no tiene más un anuncio que decía: “José López Portillo Presidente”, estaba el basurero de la ciudad, al pasar por ahí apestaba de lo más horrendo. Inmediatamente después y del lado derecho estaba “la casa de la risa” mejor conocida como el “manicure”, el Hospital de Santa Catarina para enfermos mentales.

Unos 2 o 3 kilómetros adelante, que por allá del año 83, 84, se me hacían eternos….esta el puente Rojo, ahora es un puente para autos que ya ni es rojo, pero hay un letrero que indica que ahí es. Como ha cambiado todo, la explosión demográfica ha hecho su efecto y aquella zona que visitaba con frecuencia en mi niñez, ahora es una pequeña ciudad olvidada, dormitorio seguramente de mucha gente que labora día a día en esta gran metrópoli.

Después de un pequeño flash back a mi niñez y continuando con nuestro viaje, fuimos a parar a Africam Safari, cuyo nombre me sonaba familiar desde aquellos programas de Fito Girón, donde le hacían mucha promoción, justamente, por aquellos “earliest 80s”.

Realmente el lugar no se me hizo la gran maravilla como me lo imaginaba desde mi niñez. Aclarando que nunca había tenido la oportunidad de ir, y nunca tampoco me surgió la curiosidad de pedirle a mi padre que me llevara. Yo era más de practicar deportes y un tanto cuanto rudo en mis juegos cotidianos como para querer conocer un lugar que en aquel entonces debió estar tan lejos como el África misma.

Pues al nene le fascinó!!!!, estaba encantado con los leones, los cuales son sus preferidos, y mas esta ocasión que tuvo la oportunidad de verlos tan de cerca. A pesar de que hay muchos animales interesantes en este zoológico, a el le encanto la zona de leones y creo que salio maravillado del lugar.

El recorrido constaba también en un paseo por la ciudad de Puebla, ya para las 2:00 o 2:30 PM estábamos por allá, buscando un lugar donde pudiéramos saciar nuestro voraz apetito, fue ahí cuando recorrimos el centro de la ciudad capital del estado del mismo nombre.

Después de comer comida típica del lugar, nos aventamos otro pequeño tour por el centro de la ciudad. La verdad que nos falto tiempo para conocer mas lugares interesantes y unos que otros que están a las afueras de la ciudad.

Tomamos un recorrido guiado por la catedral, la cual tiene una historia fascinante, descubrimos que tiene mas de 400 años de antigüedad, sus columnas, bóvedas cilíndricas, y decorado en oro de 18 kilates, (según el guía), la hacen una maravilla y la convierten en una joya de nuestro país.

El guía explicó que esos recorridos fueron propuestos por la secretaria de Turismo del Estado, atendiendo una idea que tuvieron de que al parecer no se le atiende al turismo mexicano, y es una gran y triste verdad, dijo el guía que en ocasiones un Japonés, un Francés o un Gringo, se van sabiendo mas de la cultura e historia de nuestro monumentos y edificaciones que los propios mexicanos, cosa que tiene absolutamente toda la razón!!!

Y si, realmente a mi me gusto Puebla, me pareció un estilo parecido a Morelia, y coincido mucho con lo que dijo el guía, tenemos una mala costumbre de mirar hacia fuera, que aunque aquí también hay cosas hermosas, siempre pensamos salir antes de conocer realmente México. Andamos siempre queriendo ir de shopping al otro lado, o hacemos cochinito pa´irnos a las Europas y muy pocos en verdad hacemos turismo dentro de nuestro país, y si, honestamente tenemos cosas maravillosas en nuestro hermoso México.

Apoco no?