Me gustó pero ahora me gustó mas, el verde de los árboles en todo su esplendor, el calorcito
Pero llegar a la capital no fue del todo miel sobre hojuelas, el vuelo se retraso por tres horas debido a una tormenta que azoto la unión americana esa tarde; llegamos con buen tiempo al DFW-Airport y ya antes de llegar las nubes habían cubierto los cielos Texanos, una negrura en el horizonte se dejaba distinguir y la lluvia era inminente.
Pensé que era solo un chubasco, como diría mi abuelita: “Una agüita espanta pendejos”!!! Pero no, al momento de estar en el check-in se soltó, para cuando me di la vuelta y mire a través del ventanal, el aguacero estaba cayendo a plomo y no se veía pa´ cuando se quitaba.

En esas circunstancias llegamos a DC. Muy cerca de la media noche el avión aterrizó en Dulles y esperando a que lo demás fuera pan comido puesto que era vuelo Nacional, pues fue lo mismo de siempre. El equipaje se tardo una eternidad en llegar, (afortunadamente en gabacholandia si te indican donde llega tu equipaje al descender el avión) y por fin llegó.

Ya pasaditas de la media noche llegamos al Hotel y de inmediato nos preparamos para hacer la meme por que al otro día comenzaba mi curso, yo caí rendido por que traía desveladas atrasadas y aun no me recuperaba de la peda aquella de un par de días atrás, así que esa noche dormí como angelito.
Ya para el viernes, mi curso terminó, habíamos conocido algunos lugares de la capital, y aun íbamos a pasar el fin de semana por allá visitando otros lugares e inevitablemente a los malls a acabar con la tarjeta de credito!!!.
Sábado y domingo a turistear, Fuimos al Museo de Historia Natural (recomendable) y por recomendación de Mendiola fuimos el domingo al museo de la NASA y aeroespacial…muy chingón, al nene le gustaron los astronautas y los cohetes, pero fue más de su agrado el Smithsoniano, mucho más la sala de África donde estaba su animal favorito, el León.
Vacaciones caras pero productivas, gracias al Tío Sam pude llevar a mi familia a conocer la capital de los Estados Unidos, aunque la primera semana fue patrocinada por el gobierno, los otros dos días si los tuve que pagar de mi bolsillo, pero aun así valió la pena, y sobre todo que ya no compraré ropita ni cositas por lo menos hasta navidad….
El Lunes por la mañana, el regreso.
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